El domingo a la nochecita, Solís sorprendió a River Plate y le ganó 2 a 1 en el partido que cerró la décimo tercera fecha y la etapa de clasificación del Torneo Apertura 2023. A pesar de la caída, el elenco de la Plaza Belgrano, con 23 unidades, finalizó sexto en la tabla de posiciones y por los cuartos de final jugará el clásico ante Rivadavia.
Desde que Germán Páez y Luis Perroud tomaron a su cargo el plantel de Solís realizaron un trabajo serio, responsable, acomodaron el equipo sobre la cancha, le dieron orden táctico, ritmo, de a poco lo fueron haciendo más competitivo y lograron cambiar el rumbo de una campaña muy floja con tres victorias (una de ellas nada más y nada menos que ante Capilla) y dos empates en nueve presentaciones. El camino a recorrer es largo pero se nota una clara mejoría.
Lo de ayer fue una muestra sencilla de esa labor porque se plantó con dos líneas de 4 bien definidas y ordenadas para achicar espacios más el retroceso generoso de Gustavo Molina, que jugó muy bien, para darle una mano a los volantes y engrosar la zona central. El plan se completó con el oficio de Lautaro Cebrelli para marcar el lateral derecho, con la firmeza que exhibió el zaguero José Rojas, con la reconocida experiencia de Bernabé Burgos para patrullar el mediocampo y el buen criterio de Julio Medina para administrar cada balón que pasó por sus pies. Fue una idea simple pero ejecutada con dignidad y con conciencia de sus limitaciones.
River Plate, a pesar del toque prolijo en la primera puntada de Franco Toledo, nunca pudo manejar cómodo la pelota porque le faltaron movilidad, dinámica y sorpresa. Ni el joven Marcos Cisneros ni Lucas Inzaurralde se mostraron como salida por los laterales. Tampoco los hermanos De Blas (Valentín que fue por derecha y Tomás que jugó bien abierto como volante izquierdo) pudieron prevalecer por las bandas ni Máximo Griego pudo hacer pesar su tranco largo en la presión.
En ese panorama, menos que discreto, el elenco de Luis Lanzone solo aportó la habitual disciplina de Mateo Antonijevic para encimar al punta rival, la voluntad de Luis Maggio para entrar y salir del frente de ataque para intentar abrir algún espacio y en el complemento los piques de Luciano Conti, que ubicado como extremo izquierdo generó dos penales y estrelló un disparo en el palo del arco que da espaldas a la calle Fitte.
El partido fue parejo, impreciso, con pocas llegadas de peligro, con escasa claridad pero ganó en emoción cuando a los 13 minutos de la segunda etapa Julián Medina abrió el marcador. Maggio empató de penal a los 21’ y el propio Luis falló otra ejecución desde los once pasos a los 41’ porque su tiro voló sobre el travesaño.
Es cierto que en la mayor parte del cotejo River Plate tuvo más la pelota en su poder y que intentó tomar la iniciativa pero su fútbol no tuvo vuelo ni imaginación ni siquiera cuando su entrenador apeló a los ingresos de Julián Casas y Nehuén Guzmán con la intención de acompañar a Toledo y por eso en última instancia recurrió al entusiasmo del flecha Thomás Cufré para ver si podía sacar provecho de su portentosa potencia pero tampoco obtuvo resultados positivos.
A los 44 minutos el árbitro Brian Mangieri sancionó un nuevo penal tras una intervención de Antonijevic que Nahuel Falcone transformó en agónico triunfo de Solís con un potente remate que venció la resistencia de Geremías Calabrono y dejó a River Plate preocupado por su rendimiento y con Rivadavia esperando en el horizonte cercano.
Solís: Federico Rojas (6); Lautaro Cebrelli (5), Nahuel Falcone (6), José Rojas (6) y José Molina (6); Román Medina (5), Bernabé Burgos (6), Julián Medina (6) (luego Javier Belsito) y Alexis Favatié (5) (sustituido por Tomás Mansilla); Gustavo Molina (6) y Javier Mendoza (5) (más tarde Juan Parra). DT: Germán Páez.
River Plate: Geremías Calabrono (6); Marcos Cisneros (5) (más tarde Thomás Cufré), Álvaro Bovetti (5), Mateo Antonijevic (6) y Lucas Inzaurralde (5); Valentín De Blas (5), Franco Toledo (6) (reemplazado por Nicolás Moisés), Máximo Griego (5) (sustituido por Julián Casas) y Tomás De Blas (5) (luego Nehuén Guzmán); Luis Maggio (6) y Luciano Conti (6). DT: Luis Lanzone.
Goles: 58’ Julián Medina (S), 66’ Luis Maggio (RP) de penal y 89’ Falcone (S) de penal.
Juez: Brian Mangieri.
Público: 140 personas.
La Figura: Gustavo Molina (6) de Solís.