Cuando en 2019 Valentín Griguelo debutó en la Primera de Rivadavia rápidamente dejó en claro que había llegado para ganarse un lugar entre los mayores.
Tras la pandemia de Covid 19, que obligó a un prolongado paréntesis de más de un año sin fútbol, Valentín se consolidó entre los titulares de un cuadro panzanegra que perdió por penales con Capilla la definición del Torneo Clausura 2021 gracias a su generoso despliegue de energías y a su ductilidad para acomodarse en cualquier sector de la cancha donde el conjunto necesitara sus servicios.
Con esos atributos más una mayor cuota de experiencia, Griguelo fue un hombre clave en la estructura del elenco de la avenida Vieytes que fue protagonista de la temporada pasada rindiendo al máximo como volante por izquierda, como doble 5 adelantado para ir a presionar, como un 8 con libertad para transitar por tres cuartos de terreno y en alguna ocasión también como zaguero central con mucha medida para barrer las puertas de su propia área.
Valentín es un digno jugador de Rivadavia: temperamental, aguerrido, con mentalidad ganadora, zurdo, dinámico, con buen juego aéreo aunque no es alto y muy aplicado tácticamente.
Con la sangre panzanegra corriéndole por las venas, Valentín Griguelo es otros de los integrantes de una nueva camada de futbolistas que nos hacen pensar con entusiasmo en el futuro.