Unión por Areco cerró anoche su campaña electoral en un salón del Centro de Jubilados colmado por más de 400 personas. El acto fue la coronación de un largo recorrido que comenzó el 24 de junio, el mismo día que se presentaron las listas de candidatos y que tuvo una primera parada significativa en las PASO del domingo 13 de agosto.

Tras los discursos de apertura de Paco Durañona y Florencia Mendizábal y ante un auditorio compuesto por militantes jóvenes y otros con frondosa historia, reconocidos dirigentes (entre ellos Nicolás Marinkovic, Mariano Pinedo, Francisco Lobos, Leonardo Sorchilli, Ramiro Ramallo, Paula Suárez  y Andrés Antedoménico) pero sobre todo por vecinos de los barrios más populares del pueblo, Agustín Casares detalló cada uno de los principales puntos de la plataforma de propuestas que piensa implementar como guía de su gestión de gobierno a partir del próximo 10 de diciembre.

Apoyado en placas proyectadas en una pantalla gigante y con un tono didáctico, el candidato a Intendente habló sobre el acceso a 500 viviendas y lotes y de la construcción de 200 cuadras de asfalto, explicó de qué se trata la provincialización de los recursos humanos de salud, propuso una actividad pareja en turismo para todo el año apuntalada por el fomento de la cultura y en la recuperación de la zona de la costanera, aseguró que va a seguir con las obras hidráulicas, que va terminar la planta depuradora de líquidos cloacales y que va establecer un centro de atención primaria de la salud en el barrio de la Estación. Además garantizó que va a concluir el edificio para la escuela secundaria 4 y entre muchas otras cosas ratificó una idea que ya había planteado días atrás: abrir la convocatoria para conformar un gobierno de unidad para todos los arequeros.

En poco menos de cuatro meses de trabajo político intenso, Agustín dirigió con llamativa armonía un verdadero equipo de personas que llevaron adelante una campaña colectiva, visitó a una cantidad difícil de precisar de vecinos, participó de decenas de reuniones y utilizó con inteligencia las redes sociales con la finalidad primordial de darse a conocer para que la gente se entere de sus ideas, de sus proyectos, de su trayectoria de más de una década en la función pública, tiempo en el que conoció prácticamente todos los secretos de una gestión municipal para tornarla eficiente.

Ese objetivo, el de hacerse conocido, lo logró largamente y pudo dejar en claro su capacidad de diálogo, su profundo conocimiento de todos los temas que hacen a la tarea de un Intendente moderno, a la altura de siglo XXI, su sincera predisposición para escuchar las demandas de un vecindario que reclama una pronta mejoría de muchas aspectos, que van desde las más básicos como la prestación de los servicios públicos elementales de limpieza urbana hasta las más complejos como es el cuidado de la salud mental de una ciudad que sufrió cuatro suicidios desde comienzos de 2023.

Agustín pudo transmitir con nitidez que está dispuesto a tomar a su cargo el Municipio con todos los problemas que eso conlleva después de cuatro años de una administración de Juntos por el Cambio marcada por el ajuste y los recortes del gasto y de la inversión (sobre todo del salario de los trabajadores municipales) pero que además sabe cómo hacerlo desde el primer día que ingrese a la vieja casona de la calle Lavalle.

A menos de 48 horas del decisivo domingo 22 de octubre, el candidato de Unión por Areco le dio el último impulso a su envión en la carrera por llegar a la intendencia y el resultado de la elección local, en una cerrada puja voto a voto, es tan abierto que parece una moneda girando en el aire.

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