Paola Pavanello, funcionaria del Ministerio de Cultura de la Nación, habló con Días de Areco sobre la participación de la Sociedad Italiana en la Red Federal de Teatros y de la inclusión del Galpón Chamico en el programa Gestionar Futuro, ambas iniciativas promovidas por dicha cartera.
Durante la entrevista, que fue muy rica, Pavanello analizó la fuerte relación que existe entre un hecho cultural y la economía, al mismo tiempo que se mostró preocupada por la gestión en cultura de la actual administración municipal.
La Sociedad Italiana forma parte de un programa del Ministerio de Cultura de Nación que se denomina Red Federal de Teatros…
“Con la Sociedad Italiana hicimos un proceso importante y muy virtuoso. Cuando yo estaba trabajando en el Municipio tratamos de incluirlos en el espacio INCAA pero pensamos que es un teatro italiano hermoso y que se podía hacer algo más. El INCAA tiene un programa para instalación y mejora de salas con equipamientos para los Municipios que los sepan gestionar. Pero el año pasado el Ministerio de Cultura puso en marcha otro programa que se llama Red Federal de Teatros para acompañar con financiamiento y capacitaciones en convenio con el Teatro Nacional Cervantes y el Instituto Nacional del Teatro para que circulen obras por salas que estén bien equipadas, bien preparadas, con buena instalación eléctrica, con luces. Es ahí donde ingresaron los compañeros y compañeras de la comisión directiva de la Sociedad Italiana y aprovecharon todo”.
¿Ese programa ya está en plena ejecución?
“Ya compraron varios equipos de sonidos y luces pero además quedaron en conexión con otros teatros y con el Cervantes porque forman parte de una red. O sea que más allá del subsidio, entraron en contacto con otros teatros para aprovechar y compartir más los recursos porque circulan elementos, materiales, obras. Los ganadores de los regionales y provinciales de teatro van a salir de gira por las salas que conforman esta red federal. Esto le agrega al Vieytes, además de las proyecciones de películas que ya tenía, una actividad teatral a nivel nacional y con un escenario adecuado para que esas obras se presenten”.
El Galpón Chamico también tiene relación con el Ministerio de Cultura de la Nación…
“También sigo mucho de cerca lo que pasa con el Galpón Chamico. Ellos vienen acompañando varios de sus proyectos con un programa que se llama Gestionar Futuro y compartieron la experiencia de cómo postularse en una charla que ofrecimos hace un tiempo atrás, cosas que para el campo cultural a veces cuestan bastante. Pasa por trabajar en red para sostener propuestas culturales en un momento donde no hay un acompañamiento fuerte desde el Municipio pero no deja de ser una oportunidad para que los artistas se organicen”.
¿Se puede relacionar a la acción cultural con la economía de una ciudad?
“Está sobradamente demostrado el aporte que hace la cultura al PBI de Argentina. Lo que se mide ahí son libros publicados, series, películas, discos vendidos, en fin bienes y servicios culturales producidos por diversos sectores que generan un movimiento económico gigantesco. Cuando un artista se presenta en público comienza a generar un movimiento económico a su alrededor con el que vende la cerveza, con las ferias que están en torno a un festival, los artesanos, los que venden espuma en el carnaval. Con todo eso se activa un sistema económico desde un hecho cultural. Se está estudiando el impacto real que tienen las fiestas y los festivales en la economía empujada por la cultura. Hoy la gente consume muchísima cultura a través del celular en lo que se llama convergencia digital y deja de ir al cine, al teatro, a la librería y consume a través de una pantalla y esa plata va al proveedor de internet. Ahí es donde debemos tomar conciencia que son los productores de cultura los que le dan contenido a todo eso. En esto es clave el rol del Estado que debe acompañar, capacitar para producir sino el mercado nos devora”.
¿Le preocupa la falta de fomento de la cultura en la actual gestión municipal a cargo de Francisco Ratto?
“Sí, porque el Ministerio de Cultura tiene muchos programas y nunca encontramos a nadie con quien dialogar en San Antonio de Areco. Creo que desde 2020 cambió dos veces la persona que estaba al frente de la gestión de cultura pero nunca hubo conexión. Tuvimos un par de consultas pero faltó el trabajo posterior porque para gestionar tenés que trabajar mucho. Hay que tener un proyecto claro, una estrategia de desarrollo, saber qué es lo que pasa, qué es lo que tenés como Estado, cómo organizar todo y luego llevar adelante un programa cultural. Pero a nivel local no se ve nada de eso porque nunca hubo funcionarios municipales gestionando con el Ministerio de Cultura de la Nación. Un ejemplo es la estación porque se trabajó mucho y da pena verla como está hoy”.