La Murga La Diablada organizó durante la tarde de ayer una jornada murguera que recorrió los barrios 23 de Octubre y Alborada con música y color. Usando trajes de años anteriores, integrantes de la murga comenzaron a tocar en la plazoleta Raúl Alfonsín, a la que rápidamente se acercaron vecinos curiosos.
Después de dar una vuelta alrededor de la plaza, siguieron desfilando por las calles internas del Barrio Alborada hasta llegar a la plazoleta del barrio junto al Centro de Atención Primaria de la Salud. Luego volvieron hacia el Barrio 23 de Octubre. Durante todo el trayecto se fueron sumando vecinos de la zona, entre ellos gran cantidad de niños.
Para el encuentro de ayer, los integrantes de La Diablada echaron mano a vestimentas de sus puestas de años anteriores en homenaje a Violeta Parra, Torres García y Remedios Varo y a su amplio repertorio musical que vienen aceitando desde su primera presentación en 2019.
La murga buscó con esta actividad visibilizar su trabajo artístico y salir a las pistas en este 2023 que no tuvo participación oficial de murgas locales en los festejos de carnaval. Eligieron hacerlo en una de las barriadas más populares de la ciudad casi como una sorpresa para los vecinos de la zona.
La Diablada no participó de los festejos oficiales de los carnavales el pasado fin de semana. En un comunicado publicado en sus redes, habían explicado que “Creemos en la murga como un gran espacio cultural y de contención para la comunidad, eso lleva a tener un gran compromiso con la representación de la cultura popular que en ella existe. Pero ese compromiso tiene que tener un respaldo de políticas culturales que durante el transcurso del 2022 estuvieron ausentes, la falta de financiación y acompañamiento (que ha sido reclamado en distintas reuniones con autoridades municipales) es una parte muy importante para llevarle al pueblo un espectáculo que aporte riqueza estética y musical al carnaval 2023”.