Joaquín Sills no había jugado en 2021, el año en que Huracán pudo quebrar una larga y pesada racha sin ganar campeonatos, pero cuando decidió volver a la actividad, el nuevo entrenador del club de la Plaza Gómez, Juan Rivero, lo ubicó en una inédita posición de zaguero central.

Ya durante el torneo de verano Sills se fue acomodando a jugar en la cueva, marcando en zona y compartiendo pareja con Matías Rios u otro reaparecido como Ismael Gaona y en alguna oportunidad con Mirko Zaranich o Ramiro Lavignole que se fueron alternando en la formación inicial.

En la competencia oficial, Joaquín respondió siempre. Bien parado, con una atinada lectura del partido, ofreciendo salida limpia desde el fondo, con buen juego aéreo, suplantó su falta de velocidad calibrando bien los tiempos para esperar o salir ante el delantero rival y muchas veces, cuando su equipo lo necesitó, “empuñó la lanza” y empujó con temperamento desde la retaguardia.

La verdad es que se esperaba más de Huracán, que en ambos torneos llegó hasta el Repechaje, pero la inclusión de Joaquín Sills como defensor fue una de los mayores aciertos que dejó para el globito la temporada 2022.

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