Ayer falleció el abogado José Julio Cagnoni, un hombre conocido en el vecindario por su larga actuación pública que comenzó en la década del 80 cuando trabajó en el Juzgado Federal de Morón a cargo de Gerardo Larambebere.

Pero tal vez su mayor grado de notoriedad lo alcanzó como dirigente político. A principios de los años 90 se desempeñó como asesor del Diputado Provincial Ruben Cagnoni y participó en varías elecciones internas de la Unión Cívica Radical local. Poco después integró el grupo más cercano a José Cames, sobre todo durante la campaña electoral y en el primer tramo del gobierno de la Alianza del amanecer del siglo XXI.

Luego de esa dura experiencia política, Cagnoni siguió muy ligado a Andrés Antedoménico a quien acompañó en su paso por el Senador bonaerense, en su alejamiento del radicalismo para conformar el GEN y el grado de confianza era tal, que fue el primer candidato a Concejal en la lista del frente Juntos por Areco que compitió en las elecciones de 2011. Más tarde ocupó una banca en el Concejo Deliberante hasta 2015 y al año siguiente asumió como Juez de Faltas en el juzgado N° 2 que había creado el por entonces Intendente Francisco Durañona.

José Julio era de ideas progresistas, de pensamiento socialdemócrata acuñado durante la primavera alfonsinista, orientado hacia la centroizquierda del arco ideológico y en el último tiempo coincidía con el Frente de Todos. Garantista en su concepción del derecho, dinamizó la justicia de faltas municipal y le dio un perfil más consistente, más profesional a una función compleja.

Le gustaba el fútbol, era hincha de Independiente de Avellaneda, pero también se involucró activamente en la Liga Deportiva, primero como titular del Tribunal de disciplina y desde marzo de 2022 como el Vicepresidente de la entidad.

Era un gusto conversar con él porque siempre estaba informado sobre la actualidad de San Antonio de Areco y tenía convicciones firmes para apoyar sus opiniones en el debate político que afrontó con absoluta pasión casi hasta unas pocas horas antes de su muerte.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *