Analizamos la actuación individual de los protagonista del clásico que Rivadavia le ganó 3 a 2 a River Plate.

Rivadavia

Ramiro Ciaffardini (6): saca muy bien con el pie cuando tiene que descargar largo y entrega la pelota rápido hacia los dos laterales para armar la salida. Estuvo atento, seguro y prácticamente no falló en ningún centro que cayó cerca de su arco.

Nicolás De Renzo (7): arrancó de lateral derecho pero tras el cambio de camino pasó de 5, su puesto natural, y lentamente se hizo patrón del círculo central, trabando fuerte y tocando el balón sin complicarse. Fue clave en la reacción panzanegra.

Luis Romero (6): le costó al comienzo tomar la marca de Maggio y de Conti. Muchas veces tuvo que salir lejos de su zona. Después se afirmó como último hombre, con experiencia y temperamento.

Juan Menconi (6): lo mismo que su compañero de zaga, fue de menor a mayor. Es ordenado tácticamente, cabecea bien y calibra con acierto la distancia cuando va a cruzar. Una tarea firme a partir de los 20 minutos de la primera etapa.

Manuel Achetta (6): enjundioso, metedor, sufrió la presencia de Maggi, pero luego clausuró el lateral izquierdo.

Matías Oyanguren (6): fue el jugador más claro con la pelota en los pies en los momentos más comprometidos de Rivadavia, cuando no le encontraba la vuelta al partido. Recostado sobre la derecha puso el balón debajo de la suela del pie zurdo y trató de jugar aunque encontró poco eco entre sus compañeros.

Leandro Camino (-): el volante de General Rodríguez fue una pieza fundamental en la gran campaña del Clausura 2021 pero este año casi no jugó. Estuvo 15 minutos en cancha y se retiró sentido

Benjamín Cairo (5): comenzó como mediocampista central, cubriendo las espaldas de Camino. Después pasó de 4 y tuvo problemas con la velocidad de Conti. Se fue reemplazado en el intervalo.

Valentín Griguelo (8): en la etapa inicial solo aportó esfuerzo pero en el complemento volvió a ofrecer una gran actuación. Cuando pasó a jugar como un 8 adelantado su rendimiento creció muchísimo, anotó un gol y fue un constante transmisor de temperamento y vitalidad.

Alejandro Luque (8): casi que no encontró el balón durante toda la primera mitad de clásico.  Apenas dispuso de un remate de larga distancia que pegó en el travesaño. En la segunda parte fue figura porque se tiró 30 metros atrás, empezó a manejar el balón, a tirar gambetas profundas y a generar peligro en cada intervención.

Laureano Leguizamón (5): esta vez el chinito no pudo hacer valer su técnica como en el triunfo ante Huracán. Volvió a jugar de punta pero fue muy bien marcador por la tenacidad de Antonijevic.

Tomás Martínez (7): entró por Camino y cuando se acomodó por izquierda fue importante para establecer una superioridad numérica que fue determinante en la resolución del partido. Va bien arriba, a buscar el cabezazo y cada vez gana más confianza. Fue el autor del gol del triunfo porque fue a disputar con fe una pelota en el área de River Plate que parecía perdida.

Leandro Leguizamón (6): reemplazó a Cairo y cubrió con garra el lateral derecho de la defensa panzanegra.

Ezequiel Heredia (6): otro zurdo habilidoso que ingresó para poner la pelota debajo de su pie izquierdo. Flotó suelto de mitad de cancha en adelante y mostro sus interesantes condiciones.

River Plate

Lautaro Dávila (6): es decidido y ágil pero tuvo dudas ante los centros cruzados y también cuando debió enfrentar  mano a mano al delantero rival.

Lautaro Bidondo (5): pura fibra, sacrificado, de aceptable labor en el primer tiempo pero se desordenó en la segundo etapa, cuando el cotejo  cambio de rumbo.

Tomás Portillo (6): volvió luego de una larga suspensión y trabajó casi como líbero. Jugó con bastante firmeza hasta que debió salir lesionado y toda la última línea de la Plaza Belgrano perdió consistencia

Mateo Antonijevic (6): como siempre, un verdadero perro de presa, un carcelero para ajustar la marca de Leguizamón. Cumplió con su misión.

Lucas Inzaurralde (6): en esta oportunidad de lateral izquierdo. Muy bien en la primera etapa, inclusive con algunas interesantes proyecciones ofensivas. Luego lo complicó la posición de Griguelo como falso puntero por su lado.

Juan Canaveri (8): el motor de River Plate desde el callejón del viejo número 8. Incansable para subir y bajar, estuvo en todos lados. Aun cuando River Plate se fue apagando, Canaveri mantuvo su alto nivel de rendimiento.

Julián Casas (6): dedicado a la contención se movió como tapón delante de la línea de 4 y con su tranco sereno compensó la dinámica de Canaveri y de Fantilli. Tras la lesión de Portillo bajó al fondo pero no logró acomodar a la defensa

Gabriel Fantilli (6): hizo un estupendo primer tiempo como mediocampista por izquierda. Fue y vino por su andarivel con un ritmo infernal que le permitió tener presencia en las dos áreas. Luego se cansó y fue reemplazado por Benjamín Fleurentdidier.

Luis Maggio (7): Luisito está intacto como si no le pesara el paso del tiempo. Jugó con inteligencia, recostado casi como extremo derecho. Cuando fue al choque también ganó muchas veces y anotó el 1 a 0. Fue peligroso y le generó muchos problemas a los zagueros de Rivadavia. Estuvo los 90 minutos en cancha y dispuso de una buena posibilidad para empatar pero su remate se perdió desviado.

Santiago Cicarelli (6): de buena primera etapa. Astuto, con movilidad para rotar posiciones con Maggio y Conti. Varias veces bajó para darle una mano a sus compañeros y marcó el segundo tanto. Después se fue quedando hasta ser reemplazado por Joaquín Yacoy.

Luciano Conti (6): en la primera mitad lastimó con su gambeta centellante, sobre todo cuando encaró por izquierda. Siempre fue la baraja ofensiva más importante que River Plate tuvo en el mazo pero en el complemento solo se quedó en amenazas de lo que podía dar pero que no concretó.

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