El Concejo Deliberante aprobó anoche con la mayoría de Juntos el Presupuesto 2023 para nuestro Municipio. El cálculo total de recursos alcanza casi los $4000 millones y prevé un aumento anual para trabajadores municipales de un 40% dividido en tres tramos, hasta llegar a fin de año a un sueldo básico categoría 3 de apenas $51.792.

Entre algunos de los puntos llamativos de los números que propone la gestión Ratto para el año que está a punto de comenzar se encuentran:

-El área municipal que menor aumento interanual tendrá será la Secretaría de Desarrollo Social: sus recursos subirán un 97% comparados con los de 2022, con un impacto total en el presupuesto que no llega al 2% (en 2022 había sido del 2,43%).

-Del otro lado de la moneda, el área que más mejorará su presupuesto será la Secretaría de Seguridad. Tendrá un aumento del 215% interanual y una incidencia de casi 5% del presupuesto.

-Turismo y cultura solo tendrá un 3,8% de incidencia total sobre el presupuesto, con fondos direccionados de una manera bastante particular: $18 millones irán solo para el Museo Güiraldes, mientras que turismo recibirá $17,6 millones, de los cuales $16,2 serán destinados al pago al personal.

-En cuanto a obras, el Municipio plantea una inversión de solo $92 millones para trabajos como mejoras en el Anfiteatro, la Cancha Fitte y la Unidad Sanitaria de Villa Lía, así como trabajos de alumbrado público en Areco, Duggan y Villa Lía. A eso le suman $19 millones para bacheo.

-Extrañamente, el presupuesto municipal casi no incluye información sobre recursos provinciales para obras: no contempla el nuevo programa Municipios a la Obra que reemplaza el Fondo de Infraestructura Municipal y que tendrá importantes aumentos en comparación con 2022 ni los trabajos que llevará adelante el gobierno bonaerense en Areco como el tendido de agua corriente en Villa Lía, la etapa III de Cuenca Este y las obras en el río.

La visión de los concejales

El Frente de Todos no acompañó el presupuesto 2023. En una encendida explicación de los motivos, Paula Suárez aseguró que “es una política de ajustes. No hay nada de bienes que se vayan a comprar. Hay muy pocas obras para Areco y la mayoría vienen año tras año siendo las mismas y sin ejecutarse”.

Suárez también puso el foco en que “no hay ningún ítem de recursos para abordar la violencia de género. Nos dijeron que no había recursos ni se creaba un área específica porque esto es algo transversal, pero no hay ningún recurso puesto en prevención o campañas de comunicación. Estamos en desacuerdo con esta situación. Lo venimos planteando desde hace mucho tiempo”.

La concejal opositora sostuvo que “en el Parque Industrial siguen las mismas obras que vienen hace años y los recursos están” y deseó que “ojalá los plazos fijos nos alcancen alguna vez para realizar las obras que se repiten año a año en el presupuesto”. También afirmó que “no se prevee que vayamos a comprar nuevos vehículos” para mejorar los servicios que presta el Municipio y que si bien se incluye en el presupuesto el proyecto de ampliación del Hospital Zerboni, “no hay referencia a mejorar los salarios del personal de salud”.

Por su parte, Marcelo Pereyra del Frente Juntos le respondió que “se habló de una política de ajuste, son criterios. Desde una mirada se puede interpretar como política de ajuste y de otra como una política de acompañamiento y de equilibrio a la comunidad en un doble sentido. Porque si se genera una presión tributaria aumentado muchísimo más la presión fiscal y de repente le saco más de lo que le puedo dar o estoy claramente impactando sobre el equilibrio de las cuentas domésticas, entramos en una complejidad”. 

Finalmente, antes de la votación (que resultó, sin sorpresas, con 8 votos por la aprobación y 6 en contra), Viviana Bratschi leyó parte del informe del Intendente Ratto que acompañó las planillas de presupuesto. En él, el mandatario sostiene que “fortalecimos el sistema de salud municipal, logramos el equilibrio económico financiero del Municipio, ordenamos las cuentas públicas, establecimos tasas justas y razonables y revertimos un enrarecido clima de hostilidad que por entonces atravesaba nuestra comunidad”.

Y continúa: “nos definimos como un Estado que siempre busca generar las condiciones para que el sector agropecuario pueda producir y transportar la producción con normalidad, para que el empresario invierta en nuestro distrito y genere empleo, para que el emprendedor concrete sus proyectos, para que el artesano demuestre su talento y las cooperativas puedan crecer y optimizarse con productos o servicios de calidad. Llevamos adelante una gestión responsable y transparente en el uso de los fondos públicos y hemos dado un salto de calidad en cuanto a la razonabilidad de las acciones de gobierno, desterrando en nuestro distrito la arbitrariedad y la confrontación inútil”.

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