El miércoles pasado, casi media centena de vecinos de la Plaza Gómez se reunieron para despedir el año con una cena al aire libre que tuvo lugar sobre la calle Bolívar, frente a la sede del Club Huracán.
La semana anterior, muchos de estos vecinos organizaron el tradicional pesebre viviente y como lo contó Susana Lamadrid a Días de Areco, decidieron retomar esta antigua costumbre que fortalece los vínculos sociales de una barriada con una marcada identidad.
¿Cómo nació la idea de despedir el año con este encuentro de vecinos en la Plaza Gómez?
“La cena de fin de año surgió de los integrantes del grupo que trabajó en la organización del pesebre viviente. Esa noche nos dijimos ¿por qué no nos volvemos a encontrar con los vecinos de la Plaza Gómez, ahora que se puede? Entonces el conserje del Club Huracán nos preparó una cena muy rica, muy bien servida y también muy accesible a la que asistimos 45 personas”.
¿Cuál era la finalidad de la reunión?
“Estamos muy contentos de estar juntos porque la idea es reunirnos como lo habíamos hecho en otras ocasiones. La última cena había sido antes de la pandemia, que me acuerdo fue una noche de mucho calor. Después con el Covid tuvimos que hacer una pausa con estas reuniones. Por eso digo que los vecinos quedaron contentos de verse, de charlar en un clima muy distendido y de terminar con un brindis para despedir el año”.
El vecino de la Plaza Gómez tiene una fuerte identificación con el barrio…
“Muchos recordaron otros tiempos. Yo misma recuerdo que en el barrio donde vivía antes también se hacían estas reuniones, que generan un vínculo distinto con el vecino que ven todos los días, compartiendo una mesa larga, llena de comensales que viven en un barrio con mucha historia aunque lentamente va tomando una fisonomía nueva. Pero hay muchas cosas que están desde siempre en el barrio de la Plaza Gómez que no queremos que se pierdan”.