En 2023, Paco Durañona, entonces Senador provincial, le pidió formalmente a la provincia un nuevo plan de obras e intervenciones para el río. La respuesta de la Dirección Provincial de Hidráulica no solo dio detalles de los trabajos que se hicieron desde la inundación de 2009 y del Plan de Manejo Hídrico actual, sino que confirmaron que “habiendo pasado más de 13 años de la formulación del mencionado plan, viendo los impactos del cambio climático, se entiende que podría gestionarse una actualización del Plan Hídrico, tal cual lo solicitado”.
Pero después de esas gestiones, no hubo ningún tipo de avance de parte del Municipio ni del Concejo Deliberante. En sus roles institucionales, ninguno de los dos departamentos tomó el proyecto ni avanzó con gestiones para actualizar el plan, que fue presentado en 2011.
Ahora, dos inundaciones después del pedido, la necesidad de un nuevo plan se vuelve cada vez más urgente, pero no hay respuestas.
Incluso en 2024, Agustín Casares impulsó las gestiones de un financiamiento para que el Municipio actualizara el Código de Ordenamiento Territorial, incluyendo una actualización del Plan de Manejo Hídrico. Los fondos vendrían al Municipio de parte del Consejo Federal de Inversiones y el estudio podría ser encabezado por la UNSADA e incluir toda la planificación urbana de Areco, pero la gestión Ratto tampoco avanzó con el tema.