Ayer, ante unos 350 espectadores, San Patricio le ganó 5 a 2 a Independiente y clasificó para disputar la final del Torneo Clausura 2023 que organiza la Liga Deportiva, definición donde se va a enfrentar con Rivadavia.
El gol tempranero de Pedro Cairo, cuando apenas se habían jugado 4 minutos, cambió el perfil inicial del partido porque el cuadro de Germán Mangieri pudo aprovechar su contragolpe mortífero con un Manuel Blanco inspirado y con Juan Bolea como el socio ideal para la potencia del ya mencionado Cairo, que anotó el 2 a 0 a los 28’.
Otro aspecto saliente fue la pronta lesión de Lorenzo Vidal (10 minutos del primer tiempo) que permitió el ingreso de Federico Menconi que patrulló con su reconocida capacidad delante de la línea de 4 para fortalecer el bloque defensivo. Ahí donde chocó invariablemente la búsqueda del generoso elenco de Capitán Sarmiento, que tuvo que asumir un forzado protagonismo que en principio no estaba en sus planes tácticos.
Abajo en el marcador, Independiente apeló a la personalidad de Maximiliano Marzano para hacer circular la pelota en la zona media y trató de abrir el frente de ataque con el veloz Washington Clemente por izquierda y con Matías Madariaga por el otro lado para luego buscar, en el corazón del área contraria, al grandote Lucas Sánchez y al inquieto Benjamín Ojeda que se movió sin respetar una posición fija pero casi como un segundo 9 aunque con poco peso específico.
En este panorama, San Patricio se afirmó en la experiencia de Nicanor Basavilbaso, en el oficio de Emanuel López, en la vitalidad de Francisco Simionato, en la juventud de un Mateo Alonso cada vez más confiado como segundo marcador central, en la seguridad que trasmitió desde el arco Brian Rivello, en un funcionamiento colectivo que se está acercando a su mejor versión, en el esfuerzo de Federico De Rosa para tapar el arranque de Marzano y apostó a que sus tres atacantes netos, rápidos y talentosos, le sacaran máximo provecho a los muchos metros libres que dejaba el avance de Independiente.
Esa fórmula dio buenos réditos porque a los 40’ Matías Pigretti convirtió el tercero después de una magistral habilitación de Cairo, que le dio un pase de taco que lo dejó solo ante el indefenso golero Luis Arévalo.
Marzano descontó de penal al cierre de la primera etapa y el conjunto que dirige Marcelo Duarte quemó las naves al comienzo del complemento empujado por el ingreso del veloz Agustín Del Pelo y por un elogiable amor propio que lo llevó a apretar a San Patricio contra el arco de que espaldas al frigorífico.
Fueron quince minutos donde Independiente, que también recurrió al hábil Laureano Piedrabuena, rondó las inmediaciones de Rivello y amenazó el triunfo verde amarillo, pero cuando San Patricio tuvo un respiro no desaprovechó la ocasión y liquidó el pleito con un estupendo tiro libre de Blanco (cuando se jugaban 22’) y con una entrada profunda de Martín Gignat (que sustituyó al cansado Cairo) para estirar la diferencia en el marcador y rubricar una convincente actuación que la colocó otra vez en una final y con la posibilidad de cerrar con éxito una temporada que había arrancado extrañamente floja.
San Patricio: Brian Rivello (7); Emanuel López (6), Nicanor Basavilbaso (7) (reemplazado por César Núñez), MateoAlonso (7) y Francisco Simionato (6); Lorenzo Vidal (-) (sustituido por Federico Menconi 7), Matías Pigretti (5) (luego Brian Wilson), Federico De Rosa (6) (más tarde Diego Pollier) y Manuel Blanco (8); Juan Bolea (8) y Pedro Cairo (8) (después Martín Gignat). DT: Germán Mangieri.
Independiente: Luis Arévalo (5); Ángel Hurtado (6) (después Hernán Gutiérrez), Ezequiel Vera (5) (más tarde Agustín Del Pelo 6), Javier Antonio (6)( luego Laureano Piedrabuena) y Juan González (5); Matías Madariaga (6), Nicolás Ponce (6), Matías Marzano (6) y Washington Clemente (6) (sustituido por Pedro Rojo); Benjamín Ojeda (5) y Lucas Sánchez (5) (reemplazado por Nahuel Ulere). DT: Marcelo Duarte.
Goles: 4’ y 28’ Cairo (SP), 40’ Pigretti (SP), 44’ Marsano (I) de penal, 67’ Blanco (SP), 73’ Gignat (SP) y 88’ Ulere (I).
Juez: Darío Moreno.
Público: 350 personas.
La Figura: Juan Bolea (8) de San Patricio.
