El domingo, ante algo más de 250 personas, River Plate le ganó 1 a 0 a San Carlos en la revancha por los cuartos de final y se clasificó para las semifinales del Torneo Apertura 2024 que organiza la Liga Deportiva.
El partido fue intenso y emotivo de principio a fin porque el equipo de Capitán Sarmiento presionó en campo contrario a partir de los quince minutos de la primera etapa con las escaladas por la banda derecha de Lorenzo Ruiz, con el trabajo de Alan Fernández y Constanzo Heredia que apretaban en torno al círculo central, con la firmeza que transmitían desde el fondo Matías Mansilla y el experimentado Joaquín Rabellino, con las incursiones por izquierda de Fabricio Vuagniaux, con los arranque potentes de Ricardo Barrientos y con algunos chispazos del talentoso Juan Demergasso.
River Plate aguantó esa presión luchando, metiendo pierna fuerte, corriendo y bien cerrado en defensa con el expeditivo Tomás Portillo cubriendo espaldas en la cueva y con la disciplina táctica para tomar las marcas de Lucas Inzaurralde y Mateo Antonijevic, que fue uno de los valores más destacados de la contienda, más el esfuerzo de Máximo Griego, que jugó retrasado, de Juan Canaveri, que subió y bajó por el costado derecho, de Gabriel Fantilli, que hizo un generoso sacrificio para pelear en la zona media, de Luis Maggio, que se tiró atrás y a la izquierda para colaborar con sus volantes y la velocidad de Luciano Conti que fue casi el único pero muy peligroso argumento ofensivo.
El dominio territorial de San Carlos fue nítido pero casi siempre terminó sus avances con centros aéreos que encontraron una buena respuesta en el seguro golero Jeremías Calabrono y los de la Plaza Belgrano consiguieron enhebrar un puñado de contragolpes que fueron muy punzantes con el capitán Santiago Cicarelli al acecho en las inmediaciones del arco defendido por Emiliano Aponte.
Luego de que a los 5 minutos del complemento Benjamín Ojeda (que reemplazó a Genaro Costa) estrellara un tiro en el travesaño cambió el rumbo del encuentro porque el elenco de Enzo Canali logró llevar las acciones al territorio que más le convenía y el juego se volvió turbulento, enredado, ardoroso, peleado, de dientes apretados.
Hay dos cosas para remarcar; la salida por lesión de Ruiz, que lastimaba con sus entradas como puntero derecho y que la formación de Agustín Cerdeyra sintió el cansancio de la extensa y exitosa campaña que realizó en la Copa Federación y por esa razón fue perdiendo ritmo con el paso de los minutos.
River Plate supo aprovechar al máximo esta situación con las armas que dispone: el temperamento de Portillo, la vitalidad de Fantilli, el liderazgo positivo de Maggio, el fervor de Antonijevic que empujó desde la retaguardia, la dinámica livianita de Canaveri, el cabezazo en las dos áreas de Griego, la jerarquía de Inzaurralde, esta vez en una función de neto corte defensivo y las gambetas de un Conti bastante inspirado que estuvo certero para clavar el gol del triunfo con un precisa ejecución del penal que a él mismo le había cometido Rabellino a los 39 minutos del segundo tiempo.
River Plate: Jeremías Calabrono (7); Ignacio Jacquet (-) (reemplazado por Mateo Yanquelén (5), Tomás Portillo (7), Mateo Antonijevic (8) y Lucas Inzaurralde (6); Juan Canaveri (6), Máximo Griego (6), Gabriel Fantilli (6) y Luis Maggio (6); Santiago Cicarelli (6) (más tarde Joaquín Magallanes) y Luciano Conti (8) (después Thomás Cufré). DT: Enzo Canali.
San Carlos: Emiliano Aponte (8); Joaquín Rabellino (6), Genaro Costa (5) (después Benjamín Ojeda 6) y Matías Mansilla (6); Lorenzo Ruiz (8) (sustituido por Lautaro Peñalba), Alan Fernández (6), Constanzo Heredia (6), Fabricio Vuagniaux (6) (reemplazado por Francisco Languioni) y Juan Demergasso (5) (luego Valentín Correa); Ricardo Barrientos (6) y Juan Manuel Gómez Heredia (5). DT: Agustín Cerdeyra.
Gol: 84’ Conti (RP) de penal.
Juez: Marcos Figueredo.
Público: 270 espectadores.
La Figura: Luciano Conti (8) de River Plate.
