Sin demasiados detalles sobre los números y con su mayoría, el oficialismo aprobó anoche la rendición de cuentas 2023 del Municipio en el Concejo Deliberante.
En una sesión especial de la que participaron los secretarios de las distintas áreas del Departamento Ejecutivo, Cambiemos aseguró que «lo que a la oposición le parecen decisiones mal tomadas, nosotros les llamamos decisiones tomadas a cargo de quienes están en el ejecutivo, que las vienen tomando hace cuatro años y van a seguir tomándolas por cuatro años más”.
Durante la sesión se conocieron algunos de los números del Municipio durante 2023: el déficit de las cuentas municipales rozó los $800 millones ajustado por inflación y más del 60% del presupuesto fue al pago de sueldos. En cuanto a obras públicas, se concretaron trabajos por $315 millones, el 65% de ellas con financiamiento provincial y el 35% financiamiento municipal de acuerdo al Jefe de Gabinete, Miguel Amadeo. Para contextualizarlo, el monto destinado a estos trabajos fue casi igual al que invirtió la secretaría de planificación en sueldos durante el año.
Otro punto llamativo que apareció a partir del análisis de los números entregados por el Municipio fue que, de todas las secretarías, las que menos recursos recibieron durante 2023 fueron desarrollo y producción con poco más de $100 millones, y desarrollo social con casi $140 millones. En un contexto de ajuste y dificultades económicas para muchos vecinos, la gestión Ratto invirtió poco más del 1,7% del total del presupuesto en asistencia y contención.
Tras las exposiciones de los funcionarios, que incluyó datos curiosos como la cantidad de tubos de desagüe instalados en Villa Lía o el gasto en tarjetas identificatorias para el congreso de turismo local, el debate entre los concejales viró a las decisiones políticas detrás de los números.
Soledad Zuviela fue la encargada un año más de leer un dictamen del bloque oficialista pidiendo la aprobación de la rendición. “La postura de este bloque fue y sigue siendo respaldar las decisiones tomadas por el Departamento Ejecutivo”, aseguró, destacó que 2023 fue el primer año en que la rendición dio déficit y apuntó a la inflación como la causante.
Por Unión por Areco, Paula Suárez lamentó que “no hay ningún detalle de los gastos”, que “decir que Areco estuvo encerrado en un contexto inflacionario es intentar sacarse la responsabilidad” y que “me parece muy bien que los funcionarios vengan a decir que cambiaron una goma o un cardan pero no escuché a ninguno decir qué máquina se incorporó al patrimonio municipal, por ejemplo”.
Por su parte, Agustín López sostuvo que “hay una cuestión de insuficiencia en la gestión y no es ponerles palos en la rueda, nosotros estamos acá para analizar y poner blanco sobre negro y señalar las cuestiones que consideramos que no están bien”.
Finalmente, Florencia Mendizábal apuntó que “no podemos apoyar una rendición de cuentas cuando los números no son claros, no cierran. Hay una decisión política de Cambiemos de hacer un Estado mediocre que haga solo lo básico. Nosotros no queremos eso para Areco”.