En una nueva conversación con Días de Areco, el médico psiquiatra Luis Giménez habló sobre el aumento de los comportamientos violentos en nuestra sociedad y propuso un nuevo enfoque con un abordaje interdisciplinario para un tema tan difícil y complejo.
El especialista en salud pública señaló como conveniente incorporar a todos los actores sociales en un programa para prevenir los riesgos de trastornos mentales y puntualizo que sería necesario incorporar en esta tarea a los distintos colectivos culturales de San Antonio de Areco.
¿Los trastornos mentales ocupan en el primer lugar entre los problemas de salud en el mundo?
“Esto tiene que ver justamente con un estado de mucha complejidad individual, social, institucional. Un punto de la cuestión es tener una mirada los más interdisciplinaria e intersectorial posible. Estas son dos palabras un poco difíciles porque en la práctica trabajar en forma interdisciplinaria se vuelve muy complicado por diferentes factores, pero es necesario analizar lo que viene ocurriendo en nuestra sociedad y en el mundo. Es ver cómo los trastornos psiquiátricos y de salud mental fueron aumentando de una manera exponencial al punto de ser el primer problema de salud en el mundo. Dentro de ese campo los trastornos depresivos ocupan el primer lugar. Hay encuestas y estudios a nivel nacional que muestran están muy preocupante realidad”.
¿Esto influye en los comportamientos violentos que se van casi como normalizando?
“De manera más específica están los comportamientos violentos, que se van naturalizando. Eso preocupa y hay que buscarle alguna salida porque la realidad es tan fea, por decirlo de alguna forma, tan conmovedora que también paraliza. Entonces podemos empezar a hablar de un problema que es tan grande, de tal magnitud, que no se puede resolver solo con el aporte de los especialistas o con abordajes exclusivos desde el sistema sanitario. El problema de la violencia es tan grave que es necesario incorporar a otros actores de la sociedad y existen metodologías para hacerlo. Me refiero a incorporar a colectivos que ya estén trabajando en el tema porque acá en Areco ya hay organizaciones que lo hacen y hay que ayudarlos, acompañarlos, estimularlos. Hay otros representantes sociales, como pueden ser organizaciones empresariales o las que se llaman entidades de la sociedad civil, que se pueden y se deben incorporar”.
¿Las organizaciones o colectivos vinculados a la cultura pueden cumplir algún rol en esta propuesta de abordaje interdisciplinario?
“También está el tema del arte que en San Antonio de Areco es tan fuerte, con una potencia tan grande, pero que casi no se lo tiene en cuenta desde el Estado. En el caso de la salud mental y de la salud pública sería importante poder incorporar todo ese potencial de la cultura, del arte, del canto, del teatro en programas para prevenir factores de riesgo en los trastornos mentales. Yo creo que esto se puede hacer conociendo la gente de la cultura porque tiene mucha sensibilidad, con gran capacidad artística como los vemos en los que hacen canto, teatro. Esta es una línea de trabajo para desarrollar como mecanismo de abordaje a problemas como el de la violencia y me gustaría ir armando algo con esto. Inclusive por fuera de la gestión pública porque es tan difícil y compleja la realidad que debemos ir pensando, armando y organizando nuevas propuesta con otro enfoque”.