La celebración de las fiestas patronales de 1949 fue el marco donde se desarrollaron algunos de los acontecimientos políticos más importantes de la época que con el paso del tiempo fueron tomando un alto significado histórico.
En la mañana temprano de ese lunes 13 de junio una caravana de camiones colmada de dirigentes y afiliados sindicales escoltó hasta Villa Lía al Gobernador de la provincia de Buenos Aires, Coronel Domingo Mercante que en un acto multitudinario, con jinetes portando banderas argentinas incluidas, inauguró la Unidad Sanitaria de la mencionada localidad.
En la reunión pronunció un discurso el Ministro de Salud Pública y Asistencia Social bonaerense, Carlos Alberto Boccalandro, que puso en funciones al Director del pequeño hospital, Dr. Jacobo Benzaquen, al odontólogo Eduardo Novillo y a los trabajadores de la flamante dependencia Marcelino Luzuriaga y Esmerildo Balmaceda.
Una verdadera multitud, portando carteles y pancartas con las fotos del Presidente Juan Domingo Perón, Eva Duarte y del propio gobernador, recibió a Mercante en su ingreso a San Antonio de Areco. El mandatario participó de la misa en la parroquia que ofició el sacerdote Francisco Valich y luego compartió el escenario montado frente a la Municipalidad (todavía con sede en Mitre 390) con el intendente Aquiles Pazzaglia, de pertenencia radical. En horas del mediodía una larga columna de camiones de la Federación del Transporte Automotor desfiló frente a las autoridades al ritmo de los acordes de marchas patrióticas que interpretaban las bandas del Regimiento 6 de Mercedes y del cuerpo de Bomberos de la provincia.
Más tarde, y ya con la presencia del Ministro de Comunicaciones de la Nación, Oscar Nicolini, Mercante encabezó la ceremonia de inauguración del edificio del Correo Argentino, una obra arquitectónica monumental que había comenzado en 1942 en el terreno donde antes habían funcionado el Hotel de los Inmigrantes y el Corralón Municipal. En ese momento se colocó un palco en la esquina de Aristóbulo del Valle y Alvear (que todavía eran calles de tierra y aún faltaban 20 años exactos para que el Club River Plate contara con su conserjería) y los muchos vecinos presentes compartieron un vermut que adquirió un carácter fuertemente popular.
Pasado el mediodía el Prado Español se vistió de gala con los mejores colores peronistas porque más de 2000 comensales participaron de un almuerzo para agasajar a los ilustres visitantes. El Senador provincial y Presidente de Partido Peronista local, Julio César Lescano Gorordo, fue el principal orador del encuentro.
Antes de regresar a La Plata, el Gobernador recorrió las otras obras públicas que estaban en marcha financiadas por el Plan Trienal de la provincia de Buenos Aires; la pavimentación de la avenida Vieytes, desde Arellano hasta la traza original de la Ruta 8 y Sarmiento, desde Vieytes hasta la parte vieja del cementerio y los edificios para las escuelas 5 y 8 que se inauguraron en el inicio del ciclo lectivo de 1950.
En la nochecita de ese 13 de junio tan particular, lejos del ruido político, el vecindario acompañó la tradicional procesión por las calles del pueblo de la imagen del Santo Patrono y cerró la jornada con juegos y los clásicos fuegos artificiales que se quemaron en la calle Alsina, frente a la Plaza Principal Ruiz de Arellano.