La actual sede de la Municipalidad de San Antonio de Areco fue la casa familiar de Enrique Laplacette y Margarita Safontas, emigrantes franceses que se afincaron en nuestra ciudad en la segunda mitad del siglo XX cuando compraron la estancia La Isabel, bien al norte de la zona rural del partido, para dedicarse, en un principio, a la cría de ganado lanar.
Antes de llegar a la Argentina con una carta de recomendación del General San Martín, Enrique Laplacette estuvo un tiempo en Brasil.
La casona de la calle Lavalle la construyeron en 1885 y muchos de los materiales que se utilizaron los importaron desde Europa. Esa propiedad, ubicada frete a la plaza principal, fue utilizada como vivienda hasta 1940.
Dos de los hijos de matrimonio Laplacette – Safontas, Juan y Raul, fueron Intendentes de San Antonio de Areco durante las primeras décadas de 1900. Juan también fue Diputado por el Partido Conservador en 1911. Raúl falleció en Francia en 1952.
También en su momento habitaron esa casa los doctores Alejandro Llamosas y Estaba Ladoux, que fue el último morador, ambos vinculados familiarmente a los Laplacette.
Según cuenta el historiador José Emilio Ramírez, entre 1942 y 1945 fue demolida una parte del antiguo edificio donde funcionó una gran tienda y almacén, una fracción de terreno que en 1949 fue donado a la Municipalidad para el ensanche de la calle Alsina hacia la costanera del Río Areco.
La sociedad anónima La Agraria administró los bienes de los Laplacette hasta su liquidación y en 1950 sus integrantes propusieron la donación de esa casa para que el Municipio construyera sus oficinas pero el trámite no fue aprobado por el Concejo Deliberante.
Finalmente, en 1965 el Intendente Rodolfo Idiart, que pertenecía a la Unión Cívica Radical del Pueblo, concretó la compra de la propiedad por una cifra cercana a los 8 millones y medio de pesos de la época con la finalidad de mudar allí al Colegio Nacional Juan Hipólito Vieytes que dictaba sus clases en la Escuela 1 y en horario vespertino.
En marzo de 1967, el Intendente por la Revolución Argentina, José Emilio Ramírez, restauró y amplió la vieja casona de los Laplacette y trasladó las oficinas administrativa de la Municipalidad de San Antonio de Areco que durante casi 100 años atendió en Mitre 390, actual dependencia del Concejo Deliberante, lugar donde en mayo de dicho año comenzó a funcionar el Colegio Nacional hasta que tuvo su propio edificio en 1988. Esta fue una determinación política que abrió una fuerte polémica que distanció definitivamente a Ramírez de sus antiguos correligionarios de la Unión Cívica Radical.
Además, pocos meses más tarde, Don Pepe Ramírez construyó en un antiguo galpón contiguo a la residencia: el salón de cultura Manuel José de Guerrico que fue inaugurado el 25 de mayo de 1969 por su sucesor en el cargo de Comisionado, Ángel Bernardo Alonso.