El domingo pasado, Joaquín Hernández sufrió una seria lesión: la rotura del tendón de Aquiles. Fue en los momentos previos al partido que Rivadavia jugó contra Solís, cuando los jugadores estaban haciendo el calentamiento antes de salir a la cancha. Allí, Joaquín sintió un golpe, un dolor intenso que lo dejó tirado en el piso y tras las primeras atenciones fue trasladado al hospital Emilio Zerboni donde le realizaron los estudios que confirmaron el diagnóstico inicial.
A los 41 años, Hernández se había preparado muy bien para afrontar la nueva etapa futbolística que comenzó en el club de la avenida Vieytes con la llegada de Maximiliano Sánchez como entrenador pero también lo hizo con el objetivo de alcanzar a Walter Cobo en la cima de la tabla de goleadores históricos de la Liga Deportiva, meta de la que está a pocos goles de distancia.
Desde este medio de comunicación le mandamos un fuerte abrazo y le deseamos la pronta recuperación a un verdadero apasionado de nuestro fútbol y a uno de los mejores jugadores de todos los tiempos que además se supo ganar un justo reconocimiento a nivel regional.