Ayer, ante más de 500 espectadores que colmaron las tribunas del centenario estadio Enrique Fitte, Huracán le ganó 1 a 0 a Capilla y se clasificó para disputar la final del Torneo Apertura 2024 que organiza la Liga Deportiva.
El elenco que dirige Juan Rivero se impuso en un partido tenso, cerrado, con una alta cuota de dramatismo en los minutos finales porque Capilla estaba a un solo gol de distancia de ir a los penales y trató de cercar al Globo contra el área de un muy seguro Juan Cicarella cuando el mercedino Marcos Camargo realizó una gran maniobra por derecha que el goleador Tomás Risso coronó con un derechazo certero que desató la alegría de la nutrida hinchada rojinegra.
Anoche quedó flotando en el aire la sensación que revivieron los leones de la Plaza Gómez porque los hombres de Huracán, que regaron con su transpiración el verde césped, jugaron con el mismo espíritu indómito que el 15 de agosto de 2021 les permitió dar la vuelta olímpica en esa verdadera fortaleza que es la cancha de San Carlos justo cuando se terminaba una pandemia de Covid 19 que parecía eterna.
Capilla manejó la pelota a partir de los 20 minutos de la etapa inicial. Salió desde el fondo con paciencia y prolijidad a través de la jerarquía del barbado capitán Diego Santoro y de la primera puntada que habitualmente da el zurdo Tomás Zambrana pero fue un dominio liviano, hasta tibio, más allá del retroceso de César Quinteros por el medio, de los arranques potentes de Rodrigo Rama por izquierda y de los derechazos con bastante veneno que disparó Martín Beretta desde la banda derecha.
Huracán armó un bloque defensivo denso, bien plantado, con la firmeza de Ramón Basombrío para cerrar el lateral derecho, con el temperamento de Luciano Gómez, que jugó infiltrado, cubriendo la cueva junto a Ramiro Lavignole, con Nicolás Mendizábal trabajando horas extras delante de la línea de 4, con Joaquín Sills apretando en el medio, unos metros más arriba, con el esfuerzo enorme de Facundo Filipelli y de Pedro Basombrío para completar un cuarteto de volantes que tapó espacios sin desesperarse ante la rotación de pelota que expuso su rival que casi nunca consiguió la profundidad que necesitaba para crearle peligro serio a Cicarella, al margen de algunos remates de media distancia y de los centros que tiró Beretta.
En el complemento el cuadro de Exaltación de la Cruz redobló sus avances y el Globo se apretó en el fondo, cerrado a cal y canto en la puerta del área que da espaldas a la calle Fitte.
Capilla lo encerró en su campo a Huracán pero no consiguió cambiar el ritmo para penetrar en una retaguardia que defendió con uñas y dientes.
El ingreso de Matías Romero (que entró por Beretta) generó alguna expectativa porque el zurdo emprendió varias corridas por izquierda y Rama fue de 9 neto pero el Globito fue encontrando metros libres para el contragolpe vía Camargo y Risso que a los 24 minutos estrelló un disparo violento en el palo del arco defendido por Franco Ponassi.
La tensión que invadió la cálida noche arequera hizo que muchos jugadores cayeran rendidos y acalambrados por el fragor de la contienda.
Gerardo Peralta, el entrenador azulgrana, apeló al ingreso del grandote Tomás Novillo y Rivero refrescó los pulmones de sus mediocampistas con la inclusión de Nicolás De Felice y Valentín Griguelo.
Capilla recurrió a los centros aéreos con Santoro luchando a brazo partido contra los zagueros de la Plaza Gómez y Risso aseguró la clasificación cuando ya se jugaban 44’ de la segunda mitad pero todavía sobró tiempo para algún apunte más porque el juez Ricardo Romero, de solo discreta actuación, agregó 8 minutos y en el último suspiro Rama vio la tarjeta roja.
Huracán: Juan Cicarella (8); Ramón Basombrío (8), Ramiro Lavignole (7), Luciano Gómez (7) y Marcos Jové (6); Facundo Filipelli (7) (reemplazado por Valentín Griguelo), Nicolás Mendizábal (7) (luego Nicolás De Felice), Joaquín Sills (7) y Pedro Basombrío (7); Tomás Risso (7) y Marcos Camargo (7) (más tarde Lautaro Contreras). DT: Juan Rivero.
Capilla: Franco Ponassi (6); Leonardo Fernández (7), Diego Santoro (7) y Matías Mansilla (7); Martín Beretta (6) (sustituido por Matías Romero 7), Tomás Zambrana (7), Ángel Vargas (6) (reemplazado por Joel Greco), Joaquín Gallego (5) y César Quinteros (5) (después Tomas Novillo); Kevin Medrano (6) y Rodrigo Rama (6). DT: Gerardo Peralta.
Gol: 89’ Risso (H).
Juez: Ricardo Romero.
Expulsado: 90’ Rama (C).
Público: 500 personas.
La Figura: Ramón Basombrío (8) de Huracán.