Huracán arrancó su marcha por este interrumpido campeonato Apertura con un empate de visitante frente a una formación alternativa de San Carlos y con un derrota ante Robles en Cancha Fitte, pero después se recuperó con cuatro triunfos en cadena (Independiente, Los 14, Cucullú y Villa Manchi) que le permiten compartir con Capilla el segundo puesto de la tabla de posiciones con 13 unidades.
En este puñado de encuentros, que son pocos como para abrir un juicio más profundo, el Globito mostró una condición interesante: capacidad de lucha y personalidad para sacar buenos resultados ante situaciones complicadas donde antes perdía irremediablemente. Así lo hizo en sus dos visitas a Capitán Sarmiento y en la victoria dura que consiguió en el Parque Municipal de San Andrés de Giles.
Hasta el momento, Juan Rivero optó por jugar con tres delanteros netos y poblar la mediacancha con solo 3 volantes aunque ante Villa Manchi incluyó a 4 hombres en la zona central ante la ausencia del centrodelantero mercedino Marcos Camargo.
Este nuevo esquema táctico lo deja muchas veces en inferioridad numérica en el medio y recarga la tarea de los defensores (que por lo general marcan en zona) pero cuando consigue que el balón llegue a los atacantes, Tomás Risso, Diego Arce y el mencionado Camargo que alternó en la titularidad con Lautaro Contreras, su poder ofensivo es temible y lastima a los zagueros rivales.
El torneo recién comienza y a todos les cuesta entrar en ritmo de competencia, por lo tanto que lo que se vislumbra en medio de este largo parate puede dejar de tener peso cuando se reanude la actividad, pero Huracán apunta como para estar entre los grandes animadores de esta temporada donde ya se consagró campeón del certamen de verano.