Si bien al término de la primera etapa hubo algunos chispazos más o menos subidos de tono, nadie esperaba lo que pasó al final del partido entre Huracán y Robles cuando se desató una verdadera batalla campal frente a la vieja tribuna de cemento con una gran cantidad de jugadores involucrados en un toma y daca de insultos, empujones y golpes.
El elenco de la Ruta 8 ganaba 2 a 1 y el árbitro Ricardo Romero agregó seis minutos de tiempo adicionado. En ese lapso el Globito se jugó entero mandando a Ramiro Lavignole y Joaquín Sills a cabecear en el área rival y redobló su apuesta ofensiva con el ingreso del chico Juan Segundo Rossi, volante creativo, por el zaguero Marcos Jové.
Sills tomó un rebote en el punto del penal y empató a los 48’ y segundos más tarde Conteras realizó una gran maniobra personal y decretó el triunfo del club de la Plaza Gómez, pero al mismo tiempo fue la chispa que encendió el polvorín y se generó un tumulto con carreras y peleas como no se veía en el centenario estadio Enrique Fitte desde un lejano domingo de junio de 2014 cuando los hombres de San Patricio y La Cumparsita también se trenzaron en una pelea bastante multitudinaria.
Recién el sábado a última hora se conocieron algunos datos del informe que el juez elevó al Tribunal de Disciplina con una larga lista de expulsados a raíz de los incidentes, 8 en Robles y 6 en Huracán, nomina que incluye a Marcos Camargo, Tomás Risso, Ramiro Lavignole, Felipe Novillo y Mateo Cicarella.
Como las sanciones seguramente serán muy duras, con suspensiones que abarcarán varias fechas para la mayoría de los expulsados, los dos conjuntos tendrán que afrontar los últimos encuentros de la ronda de clasificación con un plantel disminuido y sin varias de sus principales figuras.