Salvador “Chiche” Manfrida, vecino del barrio Don Pancho, habló con Días de Areco sobre la reciente inundación y comentó que tuvo un poco más de un metro de agua dentro de su vivienda.
Manfrida, que vive en esa zona desde comienzos de los años 80, dijo que está creciente fue menor que la de 2009 pero que el agua se retiró de manera muy lenta.
¿Cómo vio la inundación en su barrio?
“Esta inundación no fue como la de 2009, eso está claro, pero el agua llegó hasta la altura de la ventana de mi casa, un poco más de un metro haciendo un cálculo estimado. Lógicamente que el agua entró a mi casa, quedaron flotando los colchones y otras cosas. Lo que sí noté es que el agua tardó mucho en irse”.
¿Tuvo tiempo de levantar sus pertenencias para protegerlas del agua?
“Sí que alcanzamos a levantar pero uno pone las cosas arriba de la mesa pero el agua llegó más arriba todavía. Lo mismo pasó con los muebles que por más que los levantes el agua los agarra. Pudimos proteger la ropa pero como te dije, cuando mis hijos entraron a limpiar, vieron los colchones flotando. Nos tocó de vuelta, qué le vamos a hacer”.
El barrio Don Pancho es una de las zonas más afectadas por la inundación…
“Yo sé que vivimos en un lugar muy bajo. Esa es la verdad pero uno compró un terreno donde pudo y sabemos que somos como carne de cañón. También vean lo que pasó del otro lado de la Quetgles que se inundó mucho aunque desagotó muy rápido. Más al fondo en el barrio Don Pancho hubo mucha agua, en el comedor que era de la familia Mocciaro se llenó todo de agua. Fue una inundación muy grande otra vez”.
¿El agua vino muy rápido?
“El agua vino muy rápido, enseguida pasó la ruta y llegó por abajo del puente peatonal pero miren lo que pasó en el hospital. Cuando Durañona quiso hacer uno nuevo no quisieron políticamente y yo no quiero defender a Paco en este momento pero para entrar al hospital era verdaderamente un drama porque estaba rodeado de agua. Tampoco los vecinos de este barrio quisieron hacer las obras en el campo de Carballido, juntaron firmas para oponerse y tal vez con ese trabajo en las costas hubiéramos recibido menos agua”.