Contar con un hotel u hostería municipal en la costanera fue un antiguo objetivo de los dirigentes políticos de nuestro pueblo durante los años 40 y 50 con la finalidad de fomentar el desarrollo de la actividad turista aprovechando la belleza natural que brinda el Río Areco.
El Dr. Eduardo Novillo e Ismael Colombo, delegados por el Municipio, llevaron ese pedido en 1947 al Primer Congreso General de Turismo de la Provincia de Buenos Aires que se llevó a cabo en La Plata por una iniciativa del Gobernador Domingo Mercante.
Al año siguiente, José Emilio Ramírez y Colombo fueron los delegados de la administración de Aquiles Pazzaglia que concurrieron a la Segunda Conferencia Regional de Turismo que tuvo lugar en Junín y llevaron el mismo reclamo, moción que Areco reiteró en las dos conferencias siguientes que tuvieron como sede Luján y Tigre.
Tiempo después, cuando ya había dejado el cargo de Intendente municipal, Aquiles Pazzaglia donó el dinero para acondicionar y poner en valor un viejo edificio ubicado en el antiguo predio de la fábrica de celulosas, ya convertido en el Parque San Martín, y a finales 1965 el gastronómico José María Gaitán se convirtió en el primer concesionario de la flamante Hostería El Palomar. De esta manera se cumplió el sueño de nuestra dirigencia política, sin distinción de colores partidarios.
En la Fiesta de la Tradición de 1966, Gaitán, un verdadero pionero de la gastronomía vinculada al impulso del turismo más que incipiente por entonces, organizó un fogón criollo que contó con la actuación de Edmundo Porteño Zaldívar, que por esa época estaba en la cresta de la ola de su popularidad.
Gaitán, que también era propietario del hotel San Carlos (una construcción muchísimo más modesta que la de hoy) junto a Lucio Reyes (que era dueño del restaurant La Costa que todavía estaba ubicado en la esquina de Matheu y Belgrano) y Jorge Cagnoni, con el recordado restaurante El Encuentro, impulsaron los primeros pasos para convertir a San Antonio de Areco en un polo gastronómico atractivo para los turistas.
En 1972 los tres empresarios mencionados conformaron la Unión de Patrones Gastronómicos para solicitar un crédito en la Provincia de Buenos Aires que de la mano del ministro José María Vera Pedraza estaba promocionando el Plan Regulador para el desarrollo del turismo en San Antonio de Areco, que luego quedó en la nada.
Desde entonces, por El Palomar pasaron varios de los más destacados empresarios de un rubro que tiene una larga y rica historia pueblerina: el tan original Nani Menconi, Cartucho Lescano, el Gordo Luis Nicotera, Coquito Álvarez con su señora que cocinaba unas inigualables empanadas santiagueñas, Julio Zaldívar y Poli Basaldúa, a quien la Municipalidad no le va a renovar el contrato porque tiene previsto dejar el restaurante para montar en ese edificio un centro cultural.
¿Qué razones llevan al Intendente Ratto a abandonar un proyecto de desarrollo económico ubicado en un punto estratégico de la zona turística y a romper con una tradición gastronómica de casi 60 años de vigencia con muy pocas interrupciones?