La postal es desoladora: máquinas rotas, tiradas y llenas de tierra. La chipeadora rota, la barredora fundida. Hasta ambulancias abandonadas. El corralón está lleno de vehículos que no andan, reflejo de cómo se ha ido deteriorando el patrimonio municipal durante los seis años de Ratto.
A esto hay que sumarle que los vehículos no tienen VTV vigente, algo que sí se exige constantemente a vecinos y turistas, que reciben multas sin ninguna duda cuando incumplen con el requisito.
En los seis años de gestión que lleva hasta ahora, Ratto no ha sumado vehículos al patrimonio municipal. Ni siquiera cuando tuvo fondos disponibles para comprar un nuevo camión recolector de residuos que llegaron en 2023 desde el entonces Ministerio del Interior, demoró tanto el llamado a licitación que los fondos no le alcanzaron. Y peor aún: en vez de buscar alternativas para adquirir este camión tan necesario, terminó devolviendo el dinero ya en la gestión de Milei.
Con trabajadores con sueldos de hambre, una enorme deuda con proveedores y vehículos que se caen a pedazos, el Municipio no avanza de ninguna manera en la era Ratto. Lo poco que aún está en pie viene de gestiones anteriores y aún así recibe muy poco mantenimiento.
Gestión ausente. Camiones, maquinaria, pavimentos, red cloacal, hospital, todo destruido y a Ratto le chupa un huevo. ¿Alguien puede seguir votando a esto o a sus socios hasta hace pocos días?