El mal estado de las calles de Areco se extiende más allá de los baches en las arterias de asfalto o de hormigón. Tras las lluvias del fin de semana, lectores de Días de Areco hicieron llegar sus reclamos por las dificultades para transitar en calles de tosca o mejorado en distintos puntos del pueblo.
Una de ella es la calle Burgueño entre Durán y Martínez, zona que está cada vez más poblada porque forma parte del loteo Irazú, desarrollo urbanístico que impulsó el Municipio desde 2017 y que ya tiene varias viviendas construidas. Vecinos de la zona indican que ha aumentado el tránsito en general en esa calle, ya que muchos vehículos buscan evitar el semáforo de Quetgles y Durán, y que además son muchos los camiones que circulan por ahí.
Después de las lluvias, la calle quedó realmente intransitable, con profundas huellas y acumulación de agua que hacen muy difícil la entrada y salida de los vecinos, ya sea en auto, caminando o en motos o bicicletas.
A los pozos nuestros de cada día se les suma la falta de respuesta para las calles a las que no llegan aún ni el cordón cuneta ni el mejorado. Ya en el cuarto año de gestión de Ratto y lejos de los anuncios rimbombantes, no hubo avances concretos en materia de bacheos y transitabilidad en los barrios.