Ayer por la tarde, Huracán y Capilla empataron 1 a 1 en un partido amistoso disputado en el predio que el club rojinegro tiene en el Barrio Canuglio.
El cotejo, que se jugó en dos tiempos de 40 minutos, fue útil para ver que Juan Rivero dispuso un nuevo esquema táctico, 4-3-3, con Lautaro Contreras, Diego Arce y Tomás Risso (que fue el autor del gol) como delanteros netos.
El entrenador, que en esta temporada no podrá contar con Mateo Monserrat, ubicó a Felipe Novillo como lateral derecho y en el mediocampo se movieron Facundo Filipelli, Joaquín Sills (en su antigua posición de volante central) y Pedro Basombrío, en tanto que Ismael Gaona arrancó formando pareja de zagueros centrales con Ramón Basombrío y luego se corrió sobre la izquierda para permitir el ingreso de Matías Ríos en la cueva. El joven Danko Zaranich ocupó el arco.
En el segundo tiempo entró Marcos Camargo, el centrodelantero que proviene de la Liga mercedina y mostró pasta de hombre de área, potencia y una llamativa contextura física.
Al principio Capilla, que alistó a muchos juveniles, apretó con intensidad en la zona media pero luego fue bajando el ritmo y se apoyó en la habitual solvencia de Diego Santoro y Lautaro Camacho y Matías Romero ofreció pinceladas de su talento. Ariel Vargas anotó el gol de la igualdad.
Huracán formó con Danko Zaranich; Felipe Novillo, Ramón Basombrío, Ismael Gaona y Marcos Jové; Facundo Filipelli, Joaquín Sills y Pedro Basombrío; Lautaro Contreras, Diego Arce y Tomás Risso. Luego ingresaron: Matías Ríos, Marcos Camargo, Federico Godoy, Tomás Victorica, Juan Pruden, Ramiro Lavignole, Mirko Zaranich, Nicolás Mendizábal y Matías Petit.