Sin grandes novedades, el Intendente Ratto encabezó anoche una nueva reunión con vecinos inundados en el recinto del Concejo Deliberante. Casi un centenar de personas de diversos barrios afectados por las crecidas colmaron el deliberativo e hicieron sus preguntas y reclamos. Además estuvieron presentes concejales de los ahora tres bloques que conforman el Concejo.
Como en la reunión anterior tras la inundación de mayo, Ratto volvió a centrarse en la importancia de las obras y la importancia del involucramiento de los vecinos. Todavía a la espera de los subsidios prometidos por el gobierno nacional (ahora faltaría la habilitación de planillas de inscripción para el eventual cobro), los vecinos reclamaron por la activación y difusión de protocolos ante la emergencia.
Ratto insistió en que durante la última inundación faltó apego a las normas e invitó a los vecinos a conformar «comisiones de protocolo» para trabajar en la actualización de las medidas a tomar en caso de emergencia. También aseguró que avanzan las obras que financia la provincia en distintos puntos del cauce del rio, que habrá intervenciones en Cuenca Este y que en los próximos días recibirán un informe sobre el estado del puente de las vías del ferrocarril que funciona como contención durante las crecidas.
Una vez más Ratto reunió a los vecinos para no decirles mucho. Volvió a dilatar el debate sobre los protocolos y ni siquiera se refirió a las sugerencias concretas que un grupo hizo llegar formalmente al Concejo y circular en redes y medios de comunicación.
Después de la última inundación, todo su argumento es que las obras avanzan, que los protocolos están y las autoridades deben respetarse. En vez de avanzar en la mejora de las medidas en linea con lo que reclaman los vecinos, Ratto sigue frenando la discusión y volviendo hacia atrás cuestiones que ya parecían más o menos zanjadas.